Abstract:
El fenómeno del narcotráfico y de la delincuencia organizada en México desencadenó, por lo menos en la última década, una serie de coyunturas políticas y sociales que marcaron la pauta de la agenda nacional e internacional del país. A pesar de ser un tema urgente, las políticas públicas y de seguridad empleadas por la federación en conjunto con los gobiernos estatales no tienen la eficacia y la eficiencia para erradicar el problema de inseguridad y de violencia que aqueja a distintos sectores de la población. La entrada de efectivos militares para combatir a los diferentes cárteles de la droga arraigados en diferentes zonas del territorio parece una medida ineficiente, ya que, por un lado, los grupos armados no desaparecen con la presencia militar y por otro, el incremento de los homicidios y de las bajas de los efectivos aumentan. En esta investigación se intentará profundizar en la problemática concentrándonos principalmente en los operativos de seguridad empleados por efectivos militares en las zonas metropolitanas con mayor índice de violencia en los estados de Coahuila y Veracruz en los últimos diez años. La intención es reconocer y geolocalizar los resultados de personas abatidas, decomisos, violaciones a los derechos humanos, resistencia civil y compararlos para encontrar los puntos nodales de las zonas metropolitanas. La perspectiva teórica recupera el modelo empleado por Michel Foucault a partir de los conceptos de gubernamentalidad, seguridad y estado policial, principalmente; también se apoya en gran medida en la propuesta decolonial de Achille Mbembe de necropoder y necropolítica como dispositivos del gobierno para crear mecanismos para justificar métodos de violencia en contra de algún sector de la población. El modelo teórico se complementa del concepto experimental denominado necroresistencia que ayuda a crear categorías durante las acciones de los operativos militares en contra del narcotráfico, este a su vez, recupera la información principalmente de comunicados oficiales y notas hemerográficas. Las categorías son: delincuente abatido, civil abatido, policía batido, decomiso, fuerza de seguridad que ejecuto el operativo y violación a los derechos humanos. De forma complementaria estas acciones se ubican en un mapa cartográfico de la ciudad correspondiente previamente dividido por zona de marginación para observar que variables ocurren en mayor medida en zonas donde existe más o menos pobreza.

Abstract:
Las juventudes se  encuentra integradas por diversos grupos en constante movimiento, que influyen en el curso del los acontecimientos de la vida cotidiana. Como producto de las contreversias, o todas las garantìas individuales como consecuencia del conflicto social. El objetivo de este documento es ofrecer una aproximaciiòn teòrica de la institucionalizaciòn de las violencias, tanto estructural como cultural, en tres diferentes colectivos juveniles, como lo son en primer lugar , las pandillas en Estados Unidos, como por ejemplo la Mexican Mafia y su origen en el encarcelamiento masivo producto de las desigualdases sociales, en cuanto a seguiridad social y empleo, asi como de la discriminaciòn racial en ese paìs. En segundo lugar se analiza el fenòmeno de la Mara Salvatrcha 13 en Centroamerica, desde sus origenes y su intima relaciòn con el fènomeno de las migraciònes y la construcciòn de una identidad amenazada y por ùltimo lugar nos ocupamos de dimencionar el contexto històrico en el cual emergen los Grupos de skinheads neonazis  en Europa y  Alemania  principalmente y como estos  legitiman el uso de la violencia directa, hacia ciertos colectivos de personas en especifico, como lo es la poblaciòn LGBTITQ, la poblaciòn indigente, los grupos musulmanes y judios. Por considerarlos una amenaza para sus paises. El problema sobre la cual derivan muchas violencias tiene su origen en el habitus, que reproduce diversos estereotipos en torno a la juventud. Una de las cáracterisiticas de algunas juventudes es que se oponen a experimentar la alineación a los estadares de la madurez en la vida adultta. La juventud en la sociedad de consumo ya no adquiere el significado de status y ascenso social que en generaciones anteriores. Debído a que las oportunidades hoy en día son cada vez más escazas. en la actualidad. Dentro de los factores socioculturales que permiten el ingreso de las y los jóvenes a las pandillas en Amèrica Latina podemos mencionar: a)condiciones de vida desfavorables, b)hacinamiento en las perfierias de las grandes ciudades, c) alteraciòn del tejido social, d) poco o nulo acceso a los servicios pùblicos o sociales,  e) desempleo,  f) escuela sin capacidad de retenciòn de jòvenes en riesgo g) exposiciòn a violencia comunitaria o social y  h) cultura de la violenca imperante por ejemplo, la narcocultura.  La violencia en la juventud tambien es la expresión de la falta de voluntad polìtica y es el resultado de un proceso social que tien su origen en la fundamentaciòn de diversos discursos polìticos con diferentes reinvidaciònes sociales y es el resultado de un proceso de socialiazaciòn de un comoportamiento y transgresiones que el indiviuo sufre al encontrarse con un mundo construido desde el adultocentrismo. La juventud o mejor dicho "las juventudes" son en si,una construcciòn social, es tambien una categòrìa de análisis que puede ser abordado desde diferentes perspectivas (de género, de desarollo humano, de derechos humanos, etc.).   Palabras Clave: Grupos Identitarios, Violencia Estructural, Violencia Cultural, Juventud, Migraciones.

Abstract:
El surgimiento del crimen organizado con su origen en las prisiones brasileñas se remonta a la década de 1970, en Rio de Janeiro, y en 1980, en São Paulo y experimenta rápido crecimiento en las décadas siguientes, como señalaron los estudios de Paixão (1987)[1] y de Adorno y Salla (2007)[2]. Las gangues o comandos se formaron y fortalecieron dentro de los presídios, debido a sus condiciones inhumanas, lo que llevó a la organización de los presos a demandar mejoras. En Brasil los presidios no son “instituciones totales” como las estudiadas por Goffman (1974)[3], ni de “disciplinamiento social” en el sentido de Foucault (1975)[4]. En la mayor parte de las instituciones, la vida íntima es organizada por los propios presos y sus líderes. El Estado delega la organización de la vida intima en la institución a las gangues o comandos, o es cómplice para que éstas lo hagan, lo que explica la falta de interés político sobre el tema, e incluso de una política penitenciaria que se ocupe efectivamente del problema. En un contexto de acuerdos explícitos e implícitos con agentes del Estado, las gangues continuan con las actividades del tráfico de drogas dentro de las prisiones, con el reclutamiento de nuevos membros de forma consensual o forzada y con su adoctrinamiento. A cambio de estas posibilidades, las gangues se comprometen a “pacificar” el presidio y los barrios y comunidades desfavorecidas donde actuan. Asi, la subcultura criminal se recrea, fortalece y expande. La lectura precipitada que se hace de la situación actual de la guerra en las prisiones del norte y del nordeste  es que el Estado perdió el control de los presidios. Contrariando este consenso, aquí se sostiene que la gestión prisional, que delega la organizacion del día a día en las cárceles a los presos y lideres de las gangues o grupos, constituye una forma de producción de control y de orden social muy efectiva. Los presos, organizados en gangues, son libres para realizar en las cárceles las mismas actividades criminales que los condenaron a la prisión. En ese sentido, ese topos del desvío que constituye la carcel, con su forma de gestión particular, produce y reproduce la permanencia de los pobres en el crimen, es decir, garantiza la perennidad del margen en la sociedad, el lugar donde las clases medias y las elites mas conservadoras desean que los pobres permanezcan.   [1] Paixão, Antônio Luiz. 1987. Recuperar ou punir? Como o Estado trata o criminoso. São Paulo, Cortez. [2] Adorno, Sergio; Salla, Fernando. Criminalidade organizada nas prisões e os ataques do PCC. São Paulo, Estudos Avançados 21 (61), 2007. [3] Goffman, Erving. 1974. Manicômios, prisões e conventos. São Paulo: Perspectiva. [4] Foucault, Michel. 2007 [1975]. Vigiar e punir: nascimento da prisão. 33ª Edição. Petrópolis: Vozes.

Abstract:
Este trabalho tem como objetivo investigar a emergência e manifestação atual das chamadas “facções criminais” no município de Porto Alegre, Rio Grande do Sul, Brasil. Como ocorre com grupos criminais de outros estados brasileiros (Primeiro Comando da Capital e Comando Vermelho, por exemplo), as “facções” gaúchas têm sua origem vinculada ao ambiente carcerário, que permanece sendo um de seus focos centrais de organização e angariação de poderes. Para possibilitar tal análise, foram aplicadas entrevistas com tópicos-guia com 05 apenados do Presídio Central de Porto Alegre (PCPA), entrevistas com roteiros semi-estruturados com 05 policiais militares em ofício no PCPA e com 05 operadores do sistema de justiça vinculados à execução penal. Paralelamente, foi feita uma recuperação histórica do fenômeno a partir da pesquisa bibliográfica e documental, esta última, em especial, com base em documentos oficiais e notícias de jornais sobre o estabelecimento carcerário em questão (suas instabilidades, superlotação, administração estatal, etc.) e sobre os mercados do tráfico de drogas local. A existência da Falange Gaúcha, primeiro desses grupos no município, foi reconhecida publicamente pela primeira vez em 1987, momento em que os motins, fugas em massa e homicídios dentro do PCPA eram intensos. O progressivo aprofundamento desse cenário fez com que, em 1995, a polícia militar passasse a gerir o local, com fins de conter tais ocorridos. Substituindo a Superintendência de Serviços Penitenciários (SUSEPE), que tradicionalmente vinha cumprindo a função, a medida não deveria permanecer por mais de seis meses, dado que tinha cunho emergencial. A situação, entretanto, já ultrapassa vinte anos, nos quais percebeu-se a redução da violência interna e a erradicação quase plena dos assassinados. Por outro lado, foi possível perceber, com o desenvolvimento da pesquisa, que essa mudança também está vinculada com a pulverização e o fortalecimento de “facções criminais” em áreas externas ao PCPA, sobretudo em bairros sócio-espacialmente segregados. Igualmente, se relaciona com a intensificação de seus conflitos, o que repercute no aumento da violência no município. Desde a criação da Falange Gaúcha, outros grupos criminais emergiram em Porto Alegre, e foram incontáveis as reorganizações nos modos de funcionamento, na distribuição de relações de força, e nos métodos usados para a conquista ou manutenção, por eles, de seus territórios urbanos. O estudo indica que esses movimentos, nos quais se incluem a distribuição dos apenados no PCPA, a disposição de “facções” para dialogar com policiais no presídio (e dos policiais para dialogar com “facções”), suas maneiras de organizar a vida cotidiana em galerias prisionais e de territorializar bairros, bem como a descentralização de suas lideranças – têm incidido na manifestação dos grupos em Porto Alegre ao longo das últimas três décadas, sendo tanto influenciados por mudanças ocorridas no PCPA, quanto as tendo influenciado.

Abstract:
Desde hace varias décadas México vive una transición política hacia lo que aparentemente se observa como una ampliación de ciudadanía;  pero paradójicamente, esta alternancia política coexiste con un sistemático proceso de eliminación de una parte de la población, entre los que se encuentran luchadores sociales, políticos y sociedad civil en general, como lo atestiguan los más de 150 mil muertos, 27 mil desaparecidos y decenas de miles de desplazados, sin contar los secuestros, las extorsiones, la trata, entre otras formas de violencia ejercidas sobre la misma.  Un obstáculo epistémico en la observabilidad de este complejo proceso es la imagen de violencia instalada desde las esferas del gobierno. Desde nuestra perspectiva, el único modo de  tratar de comprender  qué sucede es buscar conocer los mecanismos de producción de las crecientes y variadas formas en que se producen en los últimos años, las bajas humanas. A través de un estudio sistemático de estas bajas, realizado a partir de la creación de una base hemerográfica en donde se registra las acciones que producen bajas humanas entre los años 2006 y 2012,  hemos podido apreciar los modos en que éstas son el resultado de la actual configuración del estado del poder en el país expresada en la construcción de una territorialidad socioeconómica y política producto de una intensa interconexión entre el orden delictual y el legal, que involucra al gobierno en el ejercicio de los tres poderes del Estado.

Abstract:
Mucho se ha trabajado en la caracterización de Latinoamérica como región, tanto para establecer las características comunes como para comprender sus diferencias.  El surgimiento de la violencia como dimensión de análisis, se está renovando últimamente debido a que varios países están pasando o han pasado por oleadas de profunda desintegración y desestructuración territorial con altos costos humanos. Es por esto que se hace necesario comenzar a caracterizar cuáles son los procesos, actores y víctimas de este escenario por el cual se está transitando. Es por esto que para alcanzar este objetivo se analizaron a partir de una base de datos hemerográfica comparativa, las bajas humanas producidas durante el año 2010, en cuatro países latinoamericanos con diferentes regímenes políticos: los casos de Colombia y México paradigmáticos como regímenes de continuidad neoliberal; y Argentina y Bolivia en donde la historia de la violencia política ha estado muy presente, ya que sufrieron históricamente varias interrupciones del régimen democrático con fuertes y sistemáticas represiones por parte del Estado a la población y respuestas organizadas y sostenidas de grupos armados contrainsurgentes, pero que durante el 2010 transitaron por un proceso de reconciliación y redistribución del ingreso, convirtiéndolos en paradigmáticos de la transición hacia modelos progresistas en el cono sur. Lo anterior para comenzar a hacer inteligibles cuáles son los conflictos que están en la base de las formas actuales de violencia, a partir de comprender las formas en que se produce la instalación de una dominación sobre los cuerpos.

Abstract:
¿Por qué es interesante estudiar el crimen organizado en Uruguay? Entre otras líneas argumentales, siguiendo a Garat (2013), las organizaciones criminales de Medellín, Juárez y Cali lavaban dinero en el país desde los años ochenta. En los últimos años, han salido a la luz indicios que Uruguay es un territorio logístico para: la exportación de drogas a Europa[1], el refugio de traficantes de drogas mexicanos y colombianos[2], el lavado de dinero, en la mayoría de los casos, del tráfico de drogas de México, Colombia, Rusia y de grupos criminales extranjeros que operan en Argentina, entre otros[3]. La “Operación Campanita” en el año 2006 dejó entrever el nivel de complejidad del crimen organizado y el sentido que tiene Uruguay en el esquema internacional del mercado ilegal de las drogas. Recientemente sucedieron acontecimientos que conectan a grupos mexicanos, como Los Cuinis y el “cártel” de Sinaloa, con Uruguay[4]. De ahí que sea interesante indagar en el crimen organizado mexicano. Los casos reseñados solamente son algunos hechos puntuales que cobraron notoriedad en el acontecer nacional. El objeto de la ponencia se aboca a dimensionar el crimen organizado en materia de tráfico de drogas en Uruguay: los sentidos estratégicos que tiene el país en el mercado de las drogas ilegales, los grupos nacionales e internacionales del tráfico de drogas que operan en el territorio uruguayo, las estrategias que se implementan para ingresar el dinero sucio del tráfico de drogas en el mercado legal, los orígenes y tipos de drogas que se comercializan. Dimensionar el crimen organizado también implica mapear las zonas donde opera el tráfico de drogas en el país. Entiendo que la ponencia cobra mayor importancia en el contexto de las pioneras y prometedoras acciones respecto a la relación de la sociedad uruguaya con la marihuana.   [1]Ver:http://www.elobservador.com.uy/presionados-eeuu-el-chapo-y-su-gente-llegaron-uruguay-n660281 Consultado el 22/08/2016. [2]Ver: http://www.excelsior.com.mx/global/2015/07/23/1036257  Consultado el 22/08/2016. Ver:http://www.lr21.com.uy/justicia/270157-el-narco-mas-poderoso-de-colombia-tendria-estancias-en-lavalleja-y-apartamentos-de-lujo-en-punta-del-este Consultado el 23/08/2016. [3]Ver: http://www.excelsior.com.mx/nacional/2016/04/24/1088403 Consultado el 22/08/2016. Ver:http://www.elobservador.com.uy/los-narcos-mexicanos-del-cartel-los-cuinis-lavaron-al-menos-us-10-millones-uruguay-n901865   Consultado el 22/08/2016. Ver:http://www.elobservador.com.uy/compinches-del-chapo-compraron-campo-us-442000-lavalleja-n660493 Consultado el 22/08/2016. Ver:http://www.elpais.com.uy/que-pasa/informe-lavado-dinero-intocables-justicia.html Consultado el 23/08/2016. [4] Ver las referencias en los pies de páginas 29 y 31.

Abstract:
América Latina se caracteriza por ser un continente con altos niveles de violencia, pero todo parece indicar que no hay un patrón general al respecto, pues se mantienen claras diferencias por región en el continente. Algunos países tienden a tener tasas relativamente bajas, como Argentina, Uruguay, Chile, Costa Rica, Bolivia; otros, en cambio, casi siempre registran tasas superiores, como México, Colombia, Brasil, Venezuela, El Salvador, Guatemala.   En el caso de México, el incremento de la violencia asociada al narcotráfico, para algunos especialistas, es resultado de la guerra declarada al narcotráfico por parte del ex presidente Felipe Calderón, que lo único que provocó fue una ola de violencia, impunidad y miedo entre la ciudadanía. Así como a la aparición de algunos grupos delictivos como los Zetas, La Familia Michoacana, Los Caballeros Templarios y el Cártel Jalisco Nueva Generación, que tienen una fuerte relación con el mundo del narcotráfico y por la ola de violencia que su dominio y la lucha entre grupos ha provocado en algunas regiones del país.   En el caso Colombiano, desde hace casi 60 años el uso privado de la violencia ha sido el mecanismo privilegiado para el control social y territorial por parte de los diferentes actores armados. Actores de diversos orígenes: políticos, criminales, ideológicos, pero que a lo largo de la historia del país presentan claros procesos, no solo de antagonismo, sino de complementariedad, que hacen borrosa la línea que separa la violencia derivada del narcotráfico de la violencia producto de actores del conflicto armado, como guerrillas o paramilitares. No obstante, nuestras cifras superan todos los limites, en la época más cruenta de la “Guerra contra el Estado” declarada por el “Cartel de Medellín”. Sin embargo, los análisis han privilegiado una lectura política del actor armado, descuidando la valoración de los costos sociales de esta violencia.   En este sentido, más allá de su impacto en el desarrollo económico, las violencias derivadas del narcotráfico y la delincuencia afecta el tejido social, generan costos sociales que impactan en las relaciones interpersonales y en la calidad de vida de la personas y tienen efectos multiplicadores.   Para analizar el impacto de las violencias en México y Colombia es fundamental reconocer que las violencias son el resultado de las violencias estructural y la simbólica, pero que también existen factores de riesgo que crean condiciones detonadoras para su escalada. Por tanto, se parte de la premisa que tanto el origen, la expresión e intensidad de las violencias es diversa en cada territorio.   Por lo anterior, el objetivo de esta ponencia es dar a conocer parte de los resultados de una investigación cuyo fin es el de identificar y analizar los costos sociales de las violencias en los diferentes ámbitos del desarrollo de las sociedades mexicana y colombiana.

Abstract:
El fenómeno de las pandillas en El Salvador se ha convertido en una problemática que trascendido la tendencia de ser un simple problema de violencia juvenil y control de territorios. Las pandillas de El Salvador en su mayoría están integradas por jóvenes que rondan las edades 12 a 25 años de edad, se ha convertido en un problema de preocupación nacional que afecta de forma directa a los diferentes sectores de la sociedad salvadoreña. El abordaje de este trabajo se enfoca de forma particular en la relación directa que existe en la base de su organización y la estructura de estos grupos, en la que jóvenes y hasta en  algunos casos niños son los miembros activos de estos. Se parte de un enfoque histórico que marca el precedente y el origen de estas formas de organización de pandillas juveniles, que en la actualidad ya se les considera como grupos terroristas por la capacidad de acción, organización y terror que generan en las personas civiles. El enfoque se hace desde una perspectiva de análisis y documentación a partir de algunos artículos y estudios de casos que se tienen de miembros de pandillas y personas vinculadas  ellos, se han tenido consideraciones discrecionales para poder hacer un trabajo de esta área. Ya que el riesgo en el que se incurre al abordar este tipo de temas puede ser muy peligroso para los académicos e investigadores.

Abstract:
A once años de la guerra del Estado mexicano contra el crimen organizado de drogas se han multiplicado sus efectos y consecuencias no deseados. En efecto, la intervención militar y el uso de la fuerza pública han traído consigo la fragmentación de las otrora grandes organizaciones criminales, lo que ha derivado en el crecimiento de la tasa de homicidios, un cambio cualitativo en la forma de la violencia criminal, la diversificación de la paleta de delitos cometidos por las organizaciones criminales, el aumento de casos de desapariciones forzadas y fenómenos masivos de desplazamiento forzado. Los indicadores de estos procesos son elocuentes y apuntan más a anunciar el fracaso de la guerra contra las drogas y a repensar los límites del paradigma prohibicionista que la sustenta. En este sentido, distintos estudios han señalado la necesidad de encontrar las causas de este fracaso. De ahí que se hayan publicado desde análisis de las estrategias militares, hasta estudios sobre los flujos de las sustancias psicoactivas ilegales. En este sentido, mucho se ha estudiado sobre la situación de las comunidades (semi)rurales vinculadas con la producción de drogas y el respaldo social que brindan al campo criminal. Por tanto, esta ponencia contribuye a entender el acoplamiento entre el campo criminal y su respaldo social a través del análisis de la función que el crimen organizado de drogas ha jugado en la resolución de problemas y conflictos comunitarios, así como el análisis de la sustitución que las organizaciones criminales han hecho de instituciones estatales y de la forma en que el gen criminal se ha inoculado en contextos semirurales. A través de un estudio de caso, y mediante una metodología cualitativa de tipo etnográfico, reconstruyo la historia del tráfico de drogas en una localidad de Michoacán, México y muestro cómo el crimen organizado se convirtió en este factor de mediación y resolución de problemas que correspondería al Estado. El trabajo discute las teorías convencionales sobre el crimen organizado de drogas y las critica desde una perspectiva sistémica.

Abstract:
Existe en el Cono Sur una creciente preocupación ante el desarrollo de nuevas formas de delito organizado. El continente latinoamericano enfrenta una serie de nuevos desafios que llaman a la necesidad de estudios más rigurosos y una mayor preparación desde los gobiernos, investigadores y sociedades en su conjunto. Algunos de los desafíos mas visibles de este nuevo fenómeno son: la aparición de mercados ilegales de drogas particularmente violentos en ciudades que históricamente habían tenido tasas de homicidios relativamente bajas, como Rosario (Argentina) o Montevideo (Uruguay); el tráfico ilegal de personas en un contexto de aumento de la punitividad en el control de las fronteras; corrupción y delitos financieros de gran escala que amenazan la estabilidad de los gobiernos de forma estructural y sistemática; o los crecientes daños sociales y medioambientales derivados del mal uso de tecnologías en el sector agropecuario. En este contexto, se propone analizar el estado del conocimiento en torno al delito organizado en América Latina. Más específicamente, se introducirán primero las principales perspectivas teóricas y metodológicas que han guiado la producción de investigación sobre delito organizado a nivel global. A continuación, se presentará la evolución del estado del arte sobre delito organizado en América Latina, diferenciando temas, poblaciones de estudio y principales marcos teóricos-metodológicos utilizados. Por último, se reflexionará sobre los desafíos de investigación y prevencion en esta temática en la region del Cono Sur.