Abstract:
Actualmente el desarrollo de las actividades de la agricultura familiar resulta imprescindible para alcanzar la seguridad alimentaria. Más de tres mil millones de personas que viven en áreas rurales pertenecen a familias que se dedican a la producción en este sector. La agricultura familiar produce y aporta gran parte de los alimentos que se consumen en el mundo. La agricultura familiar está estrechamente relacionada con el ambiente y con el desarrollo territorial. En la región V Altos Tsotsil-Tseltal de Chiapas, se desarrolla una agricultura de autoconsumo, cuya producción se organiza de manera familiar y se basa principalmente en el sistema milpa tradicional. Sin embargo, esta agricultura se ha ido transformando debido a diversos factores económicos, políticos, sociales y ambientales. En las comunidades de la región se identifican nuevos procesos productivos y organizacionales de la agricultura familiar que se han generado por la implementación de diversas estrategias y/o alternativas productivas en la producción agrícola de autoconsumo y comercial. Por ello el objetivo de esta ponencia es explicar los procesos de la agricultura familiar en cuatro comunidades del municipio de Chenalhó, Chiapas, en donde han surgido nuevos escenarios socio-productivos que han impactado la organización comunitaria, la producción local y las condiciones de vida de la población.   Palabras clave: Agricultura familiar, desarrollo territorial, actores sociales, organización y producción local.

Abstract:
El concepto de agricultura familiar es muy amplio y controvertido, muchas veces se alude al trabajo de los diferentes miembros de la familia como una forma de caracterizarlo, otras a la diversificación productiva, e incluso puede referir a las diferentes formas de comercialización como la venta en grupos o en cooperativas. Pero la característica fundamental es sin duda la producción de bienes destinados para el mercado en espacios donde convive la unidad de producción con la unidad familiar. Ya los clásicos de la sociología general (Kautsky, Chayanov, Marx y Lenin) se preguntaban sobre las características y particularidades del campesinado (si dentro de esta categoría podemos incluir a la agricultura familiar) y la forma de relacionarse con los medios de producción. Pero más allá de las diferencias a la hora de caracterizar a los distintos actores sociales y el debate sobre la desaparición y/o persistencia de los pequeños productores en el ámbito rural, todos coinciden en señalar que la tendencia principal del capitalismo en el agro es la modificación de la estructura social agraria, donde los campesinos y pequeñas unidades de producción tenderán a migrar hacia la burguesía o el proletariado como consecuencia de los mecanismos de concentración capitalista.  En Misiones, provincia con una larga historia de campesinos y pequeños productores rurales, las discusiones en torno a la desaparición o persistencia de la agricultura familiar parecen estar más vigentes que nunca. Con este objetivo, el presente trabajo se pregunta por las características actuales que tiene este tipo de unidades de producción. Para ello propone en primer lugar una sistematización de conceptos e ideas que nos permitan acercarnos a nuestro objeto de estudio, preguntándonos sobre las diferencias existentes (si es que las hay) con el campesinado propiamente dicho y los “colonos”, como se los conoce en la región. Por otro lado, mediante el uso de entrevistas a productores y sus familias realizadas durante los años 2016 y 2017 en la provincia de Misiones, se señalan algunas de sus características actuales, al tiempo que se intenta describir la evolución de este tipo de unidades de producción.

Abstract:
Nos últimos anos, em função de epidemias como da “vaca louca” e da “gripe aviária” os mercados agroalimentares vêm sendo fortemente influenciados por um paradigma de qualidade pautado nas características sanitárias e higiênicas dos produtos. Desde então os mercados locais e informais, vêem sendo pressionados para se adequarem às exigências das regras “impessoais” de higiene e sanidade, justificadas pelo apelo a defesa da saúde pública e bem-estar do consumidor. No Brasil a legislação sanitária justificada como instrumento de garantia da saúde pública, tem funcionado como um forte obstáculo a produção e consumo de produtos artesanais, oriundos de estabelecimentos informais. Observa-se, no entanto que as tentativas de adequação às normas sanitárias vigentes, têm implicado em uma forte seleção e uma alta taxa de mortalidade para os empreendimentos informais, não apenas pelos custos econômicos desproporcionais à escala das suas atividades, como também pela negação do modo de organização e das formas de conhecimentos tradicionais (saber-fazer) relacionados às suas práticas produtivas. Neste sentido, este trabalho tem por objetivo analisar as implicações da introdução de normas sanitárias no funcionamento do mercado do leite no estado do Maranhão- Brasil, tomando por referência o processo de implantação das Instruções Normativas 51 e 62 do Ministério da Agricultura Pecuária e Abastecimento- MAPA e sua repercussão para os produtores informais de queijo desse mercado. Por meio dos aportes da Sociologia Econômica, procuro verificar como produtores informais de queijos se inserem nesse mercado, acionando critérios próprios sobre o que consideram como a qualidade do leite produzido, por vezes distintos dos critérios estabelecidos na legislação oficial. Para estudar este processo que entendo ser de construção de uma nova convenção de qualidade, utilizarei abordagens teóricas da chamada Socioeconomia das Convenções (Boltanski &Thevénot, 1991; Salais, 2003; Allaire, 2013), que apontam para a necessidade da observação dos processos de estabelecimento de critérios de qualidade, como momento preliminar ao estabelecimento do intercâmbio mercantil de produtos agrícolas. Neste contexto, a partir do modelo das cites elaborado por Boltanski;Thevénot (1991) foi possível identificar os produtores informais de queijo ao mundo doméstico. Análise empírica se deu a partir da observação e entrevistas realizadas junto a produtores da microrregião de Imperatriz/ Maranhão/Brasil. Os dados analisados permitiram situar minimamente os entrevistados no contexto socioeconômico e produtivo da região, esboçando o repertório do conjunto de recursos mobilizados pelos entrevistados em suas ações, bem como a coleção de “seres” que compõe o universo domestico da produção de queijo (Dodier, 1993). Este procedimento abriu caminho para então se proceder a identificação dos modos de avaliação que utilizam para justificar suas posições e coordenar suas ações, bem como os mecanismos de classificação e julgamento através dos quais conferem qualidade às pessoas e aos objetos com que interagem.

Abstract:
Resumen Cuando se habla del campesinado, regularmente se le asocia a la pequeña producción para el autoconsumo, al dominio o el control legal de un predio que suele ser de temporal, el uso del trabajo familiar, su función pluriactiva o multifuncional, porque su actividad productiva en la tierra suele realizarse en menos de un año, así que el resto del año se emplea en otras actividades productivas asalariadas y a esto se suma que funciona como una formación social que se encuentra en el margen del modelo de oferta y demanda del libre mercado, porque su objetivo no es la acumulación. Cuando se emplean en trabajos asalariados, sus ocupaciones suelen ser precarias. Este trabajo, explica las características de los trabajos de los miembros de las familias campesinas de 29 localidades del estado de Zacatecas, en México. Primero, se describe el contexto rural, caracterizado por la orografía accidentada, el predominio de la flora y la fauna silvestres, la existencia de caminos de terracería y hogares construidas con tierra y techos de lámina, con predominio de prácticas de actividades primarias y extractivas. En segundo lugar se exponen los elementos teóricos del trabajo y las categorías en que se desdoblan para explicar los rasgos de las actividades productivas en la población rural. El trabajo es entenido como una actividad productora de bienes y servicios; que se desdobla en las categorías, asalariado porque se recibe un pago a cambio de lo realizado (dentro de la economía formal o como trabajo precario) y el no asalariado, porque las actividades se efectúan en los márgenes del traspatio y la parcela. En segundo lugar, se exponen los aspectos metodológicos, que implica la manera en que los elementos teóricos son convertidos en expresiones/oraciones cerradas de opción múltiple, que posteriormente son preguntadas a la población tamaño de muestra, considerada campesina. Esta parte metodológica, vinculada a la teoría, se aplicó a 1057 encuestados de 29 localidades rurales de Zacatecas. En tercer lugar, la descripción de resultados, en los cuales destaca la configuración de los trabajos de las familias campesinas, que en tanto mano de obra se distribuyen en el año en sus parcelas y el traspatio, como actividades no asalariadas pero productoras de bienes y servicios; también como mano de obra precaria adquiriendo la figura de jornalero u obrero general y, como trabajo formal decente, adquieren la forma de maestros, médicos, licenciados (en derecho, en economía, en contaduría y administración, entre otros) pero son los menos. La reconfiguración a trabajo decente, representa una modificación relevante en las familias campesinas, porque de pasar a ser multifuncionales precarios, buscan mecanismos que les permita transitar a convertirse en trabajo formal, con las prestaciones económicas que todo trabajador tiene derecho a acceder.   Palabras clave: trabajo precario-decente, rural-urbano, política económica

Abstract:
Fundamentación En el Uruguay, entre el año 2000 y el 2011 desaparecieron aproximadamente 12.000 explotaciones agropecuarias; es decir, casi una de cada cinco de las explotaciones censadas en el 2000 no existen más una década después. Con ese proceso como marco, en este artículo se realiza un estudio exploratorio orientado a profundizar en las diferencias por edad y por tipo de productor que se observan en las entradas y salidas “netas” de productores agropecuarios, según el estrato de tamaño de los mismos, a partir de los micro-datos de los Censos Generales Agropecuarios de 2000 y 2011. Problema Los cambios en el número de explotaciones agropecuarias se dan como resultado de las entradas y salidas de la actividad de los encargados de dichas explotaciones. Como afirma Smith (1987) las entradas y las salidas tienen tres componentes: El primer componente, regular y predecible, es el envejecimiento y retiro. El segundo, más variable, es la salida anticipada de productores en edad activa. El tercero, es la tasa de entrada de nuevos productores.  Una forma de estudiar estos componentes es construir cohortes de productores. La variable edad permite “etiquetar” a los productores de un Censo a otro. Un productor no puede “dejar” su cohorte: si entra o sale de la producción agropecuaria, ese movimiento será perceptible, salvo que sea compensado por un movimiento con sentido opuesto realizado justo por otro productor de su misma cohorte. Datos y método Para esta presentación se procedió a distinguir entre explotaciones familiares (con 50% o más de trabajo no remunerado) y explotaciones no familiares (predominio de trabajo remunerado) y luego se construyeron tramos de edad quinquenales para estudiar las entradas y salidas de la actividad tanto para el caso de los establecimientos familiares como no familiares. Resultados Las entradas y salidas de la producción entre 2000 y 2011 se dan de modos distintos en las explotaciones que se basan en trabajo no remunerado y trabajo remunerado. Entre los productores empresariales, el porcentaje de entradas a la producción de las cohortes “jóvenes” es una vez y media mayor al de la producción familiar. Además, el porcentaje de salidas de las cohortes en edad de retiro es un 40% mayor entre los productores familiares, comparado a los no familiares. Más allá de los “retiros anticipados” observados para el caso de los productores familiares, el grueso de las salidas de la producción se produjo en edades de retiro. Entre los PF, las salidas de productores mayores de 61 años fueron tres veces y media más que las entradas entre los menores de 45 años. Entre los productores empresariales, las salidas de los añosos fueron un 12,6% mayores a las entradas de los menores de 45 años.

Abstract:
A medida que el capitalismo se fue afianzando y estableciendo formas productivas, económicas, simbólicas y sociales diversas, los mecanismos de reproducción social fueron complejizándose y con esto, los análisis acerca de los mismos fueron mutando. Concretamente los estudios de la reproducción de segmentos vinculados a la producción agropecuaria han tenido sus propios desarrollos teóricos desde una diversidad de corrientes teóricas. Desde Kautsky a Lenin pasando por Chayanov para desarrollos en países centrales, desde Archetti a Heredia para casos latinoamericanos, se han marcado ciertos desarrollos esperados y análisis acerca de esta cuestión. Por otro lado, la producción agrícola y el mismo espacio rural han mutado fuertemente en las últimas décadas. A la par que se produjeron fuertes procesos de reestructuración productiva agrícola, observamos la ocurrencia de transformaciones en los procesos de organización social de la producción y del trabajo, que lo implicó cambios tanto para los asalariados permanentes y transitorios, así como para los trabajadores familiares y sobre el propio productor. Pero estos cambios no se redujeron exclusivamente al espacio productivo, sino que también afectaron las relaciones familiares, los roles asumidos y las formas y tramas de socialización. En este entramado, ¿qué formas tomaron estos procesos económicos, productivos, y sociales en el ámbito productivo vitivinícola de Mendoza? Concretamente, a fines de la década de 1980 comienza un período de fuertes cuestionamientos al modelo productivo vigente hasta ese entonces –denominado productivista (Neiman, 2003), y su sustitución en segmentos productivos específicos por un modelo regido por la producción de bienes diferenciados, enfocados crecientemente a mercados externos, y a estratos de consumos medios y altos (Goldfarb, 2007; Neiman y Bocco, 2001). En este escenario la pequeña y mediana producción de uvas de la zona alta del río Mendoza, que logra atravesar los procesos de reestructuración debe adaptarse a las concepciones, vínculos agroindustriales y prácticas productivas que comienzan a ser exigidos bajo esquemas productivos de “las calidades”.   Ahora bien, en esta ponencia buscamos comprender las formas de reproducción de este segmento de pequeños y medianos productores de uva de calidad, entendida ya no solo en sus dimensiones agrarias, sino en tanto estrato de la sociedad que busca reproducirse en un sistema agroalimentario globalizado. En otras palabras nos preguntamos principalmente cómo logra este segmento reproducirse en un contexto productivo reestructurado y un medio rural reconfigurado; qué procesos de diferenciación se han puesto en marcha para esta clase productiva; a qué elementos podemos vincular esta creciente diferenciación.  Para este objetivo se recurrirá al análisis de entrevistas en profundidad a productores de uva y los miembros de sus familias, buscando recuperar sus prácticas concretas de forma holísticas y contextual.  

Abstract:
El entorno rural del subcontinente se distingue por ser de intensos contrastes. Dos extremos de esa  realidad que abarca del norte de México hasta la Patagonia, son las míseras explotaciones familiares y el pujante empresariado agropecuario; prototipos ambos de racionalidades productivas distintas y que sin embargo confluyen en una dinámica de empobrecimiento estructural. Tanto la economía campesina cuya crisis lleva varias décadas, como el raquítico empleo que oferta el empresariado en sus diferentes escalas operativas y orígenes nacionales, se traducen regularmente en espirales de empobrecimiento para la población que labora los campos. En el caso del campesino, lo que obtiene en el oficio ya no compensa el esfuerzo ni cubre sus necesidades básicas, toda vez que el precio de sus productos ha declinado de modo radical en condiciones de mercados abiertos, y los costos van en ascenso por causa del retiro de apoyos estatales. Para el asalariado rural, el ingreso que recibe por un promedio de quince horas de trabajo diarias en temporada alta, tampoco resulta en un medio de vida suficiente; incluso si otros miembros de su familia están implicados en las faenas, o complementan sus ingresos con actividades no rurales. Cierto es que en general para el obrero del mundo los tiempos que corren son de pérdida de derechos; que el empleo en cualquier rama de la actividad económica escasea, se paga mal y carece de certidumbre. Empero en el campo y específicamente en el agro la situación no es en absoluto novedad; lo que es nuevo acaso es su recrudecimiento y los matices que presenta a raíz de la especialización productiva regional. En paralelo a lo anterior, la apetencia de los inversionistas por el aprovechamiento -y no necesariamente adquisición- del territorio con potencial productivo, el abuso creciente de los recursos naturales y/o el despojo deliberado del suelo agropecuario para fines de especulación, coadyuvan a la vulnerabilidad del proletariado rural. En la presentación que se propone se hace una lectura convergente de estos tres procesos (descomposición campesina, sobre-explotación del jornalero, y expropiación territorial), articulados todos a las políticas impulsoras del crecimiento agroexportador. Políticas que arrojan resultados relativamente satisfactorios en indicadores de productividad, producción y comercio nacionales, pero deficitarios en el rubro social. Los argumentos se desarrollan a partir del acervo conceptual de la Economía Política crítica, para poner de relieve un proceso de desacumulación de capital, con despojo y depredación de la naturaleza, del que participan todos los países de la región, más allá de sus singularidades.

Abstract:
En la presente investigación se abordan las dinámicas de los agricultores familiares de 6 comunidades de la parroquia de Tabacundo, ubicada al norte de la provincia de Pichincha, Ecuador. Investigación realizada para la maestría en Desarrollo Territorial Rural, de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales, convocatoria 2014 – 2016. A través de este trabajo se ha pretendido conocer los niveles de desagrarización de las comunidades en estudio, así como la territorialización o desterritorialización de dichos lugares, con un énfasis central en la distinción de diversas agriculturas familiares. Esto, teniendo como telón de fondo los cambios territoriales que generan la instalación, consolidación y decadencia de la gran producción florícola en la zona. La pregunta de investigación es ¿en qué medida las actividades de la producción florícola influyen en el cambio en la agricultura familiar de la parroquia de Tabacundo? La metodología utilizada fue la aplicación de una encuesta a los jefes de hogar de 61 familias de Tabacundo, en donde se encuestó al 10% de la población de cada comunidad, de las cuales se han obtenido datos de todos los miembros de la unidad productiva. Se han seleccionado al azar 3 comunidades de la zona alta y 3 de la zona baja de dicha parroquia. Los resultados del estudio indican en primer lugar que existe una alta desagrarización de las comunidades, que se expresa en el carácter no agrícola de las ocupaciones. Así también, se aprecia que existe una elevada desterritorialización de las comunidades rurales de Tabacundo, ya que la inexistencia de riego, la ausencia de apoyos privados y estatales, así como los bajos ingresos, hacen que los hogares agrícolas no tengan las condiciones para generar producción de alimentos, incrementar sus capacidades técnicas ni poder adquirir insumos productivos. Desde el punto de vista de la diversidad de agriculturas familiares, se aprecia que existe una heterogeneidad estructural que propicia condiciones desiguales para los pequeños productores agrícolas y florícolas, y que hace que la última sea la que tiene una mayor viabilidad económica puesto que se encuentra articulada al mercado global, sin un potenciamiento estatal de los espacios de comercio de alimentos a nivel local. Los impactos de estos procesos varían en cada comunidad. Esto, en el contexto de dinámicas productivas que funcionan bajo un Estado ausente, y con un mercado que privilegia el cultivo de flores por ser más rentables económicamente para el territorio, pero con costos socio-territoriales elevados. La ausencia de políticas públicas, en este contexto, es clave para comprender el débil papel de los productores agrícolas de Tabacundo. El desarrollo territorial rural de la zona, vendría impulsado por una autonomía legal de las comunidades, buscando insertarse en el mercado agrícola local, suprimiendo el modelo especulativo de capitalización florícola.

Abstract:
“Calintla” y la colonia “La Industrial”, son dos comunidades que pertenecen al municipio de San Bartolo Tutotepec Hidalgo,México, en estas comunidades hay productores de piloncillo y bordadoras otomíes, quienes durante años han conservado los métodos tradicionales de producción del piloncillo con trapiche y la elaboración de los bordados de forma manual, pero a raíz  de los programas introducidos por el gobierno federal y apoyos estatales, se han generado transformaciones en las formas de producir y de bordar, estas transformaciones implican la utilización de métodos tradicionales combinados con el uso de las nuevas tecnologías, generándose así un dialogo de saberes en los procesos.  Bajo este contexto aquí se presentan los resultados de un trabajo de investigación el cual se centró en identificar ¿cuál ha sido el impacto de la introducción de tecnologías sobre los saberes tradicionales de producción tradicional del piloncillo y  la elaboración de bordados?. Se recurrió a la metodología de corte cualitativo, el vínculo con los dos proyectos , tanto el de las bordadoras como el de la molienda, existe desde el año de 2012.La relación con los sujetos de estudio  siempre fue constante y las herramientas para la recogida de datos fue un proceso etnográfico que permitió vivir más de cerca las experiencias, las charlas, entrevistas y la relación con los miembros de los proyectos, permitió interpretar de manera más clara los procesos de introducción de la tecnología en los procesos tradicionales de bordado y de producción de piloncillo. Algunos de los resultados obtenidos fueron los siguientes: Las  bordadoras como los productores de piloncillo  combinan  las nuevas tecnologías con sus saberes heredados de sus antepasados, el uso de las nuevas tecnologías les permiten mejorar la calidad de sus productos ,en el caso de las bordadoras, el uso de las maquinas (over y  recta) le dan un mejor terminado a los productos y aumentan su valor en el mercado, con el uso del motor en la producción del piloncillo el ahorro  costo/tiempo se reduce, los saberes tradicionales no se sobreponen al uso de las tecnologías , ni las nuevas tecnologías al de  los saberes tradicionales, existe un dialogo en su uso, para este caso, la identidad de las bordadoras y su relación con el bordado tradicional permanece  y se hereda a sus hijas principalmente, fortaleciendo sus saberes, los piloncilleros transmiten el saber sobre el uso tradicional  del trapiche a sus hijos, pero están conscientes que el uso del motor les ahorra tiempo y costo.  

Abstract:
    Esta ponencia toma una perspectiva de género para considerar la noción de “campo global” (Woods 2007: 485) basado en un estudio de caso en un pueblo rural Andino en Boyacá, Colombia. Woods (2007) propone el “campo global” como un espacio hipotético que emerge de múltiples discursos (globales, nacionales y locales), procesos y prácticas, y que incorpora seres humanos y no humanos. Woods (2007) basado en las nociones de espacio y lugar como relacionales e interconectados de Massey (2005) argumenta en contra de las definiciones de globalización hegemónicas. Las definiciones hegemónicas argumentan que la globalización es una fuerza incontrolable y meramente global que impacta fuertemente cualquier lugar. Contrariamente, Woods (2007: 45) argumenta que “las políticas de la globalización no se pueden reducir a dominación y subordinación, sino a unas políticas de negociación y configuración”. Por ende, el enfoque de negociación y configuración tiene el potencial de producir conocimiento más especifico y políticamente comprometido con los habitantes y lugares rurales. La literatura del “campo global” esta basada en la de la “ciudad global”, que ha demostrado que desarrollar un conocimiento espacial y relacional puede contribuir a un proyecto político que se vive en las bases y localidades de estos lugares, donde varios actores demuestran agencia a través de luchas que también producen estos espacios (Brenner y Keil 2006).   En consecuencia, la ventaja de considerar el “campo global” es comprender la globalización rural desde las bases y por ende conceptualizar el cambio rural como relacional. La metodología adoptada es una etnografía visual feminista y participativa realizada en el 2016 con 29 campesinas Andinas, que incluyó entrevistas grupales y una exposición fotográfica. Los resultados revelan los impactos globales de la expansión del neoliberalismo en la vida laboral y familiar de las campesinas. Al mismo tiempo demuestran la agencia de las mujeres en recalibrar y resistir a los discursos y acciones neoliberales que permean su día a día, apelando al arraigo a la identidad campesina. En resumen, al exponer estos resultados pretendo problematizar las tendencias hegemónicas y universalizadoras que posicionan a las campesinas como victimas pasivas de la globalización neoliberal y el cambio rural en el que han estado inmersas, con supuestos sobre la modernidad y el desarrollo, sin tomar en cuenta las resistencias y negociaciones locales. Brenner, Neil & Keil, Roger. (2006). The global cities reader. Oxon: Routledge. Massey, Doreen. (2005). For Space. London: Sage. Woods, Michael. (2007). Engaging the global countryside: globalization, hybridity and the reconstitution of rural place. Progress in Human Geography, 31(4): 485–507.  

Abstract:
Resumo: Há um conjunto expressivo de estudos que versam sobre a agricutura familiar no Brasil, inclusive que abordam aspectos relacionados à sua definição operacional. Atualmente, a definição operacional estabelece que agricultor (a) familiar, segundo a Lei N° 11.326, de 24 de julho de 2006, é todo aquele (a) que pratica atividades no meio rural e atende simultaneamente aos seguintes requisitos: não detém área maior do que quatro módulos fiscais; utiliza predominantemente mão de obra da própria família nas atividades econômicas do seu estabelecimento; tem percentual mínimo da renda familiar originada de atividades econômicas do seu estabelecimento; e dirige seu estabelecimento com sua família. A definição operacional é necessária porque, geralmente, ela é utilizada para classificar o agricultor (a) na condição familiar ou não, e é essa classificação que possibilita esse grupo social – agricultura familiar – acessar condições diferenciais num conjunto significativo de políticas públicas de promoção do desenvolvimento rural. Todavia, há muitos questionamentos quanto aos parâmetros adotados pelo governo brasileiro no estabelecimento dessa definição, o que revela o quanto essa questão ainda é controversa. Possivelmente, isso decorre do fato de ainda não haver uma definição amadurecida sobre o estatuto conceitual da mesma. Nesse contexto, são relevantes as mais diferentes reflexões e contribuições sobre o seu estatuto conceitual, bem como, sobre a sua perspectiva operacional. Este artigo tem como propósito contextualizar e analisar o processo de formulação da definição operacional de agricultura familiar no Brasil e os questionamentos críticos que tal formulação suscita junto a um conjunto de pesquisadores e estudiosos da área de desenvolvimento rural no país. Ele é produzido a partir do cotejamento de um conjunto variado de documentos normativos do governo federal, sobre o tema, e da interpretação de vários textos acadêmicos que analisam a agricultura familiar e o desenvolvimento rural brasileiro. É fundamental compreender que a agricultura familiar, conforme a definição normativa vigente, não representa um conceito analítico, mas se constitui como uma definição operacional, que tem uma finalidade prática, como em uma política pública de governo ou Estado. Ao mesmo tempo, destaca-se que isso não significa que essa definição operacional não deva ser ajustada de modo a incorporar algumas contribuições críticas, como destacadas neste artigo. Por exemplo, aquelas que enfatizam a inadequação da utilização do atual módulo fiscal como unidade de medida agrária e, também, a ausência de parâmetro que melhor capte a diversidade social, que constitui o arranjo societário nas áreas rurais, como mais relevantes nesse contexto.   Palavras-chave: Agricultura Familiar; Módulo Fiscal; Definição Operacional; Políticas Públicas.