Abstract:
Desde los años ochenta, en Brasil y México se establecieron nuevos arquetipos de política social focalizada: las Transferencias Monetarias Condicionadas, creadas para romper el ciclo intergeneracional de la pobreza. Los programas aquí señalados son el programa Oportunidades (México) y Bolsa Familia (Brasil). Estos programas incluyen un paquete de inserción en los sistemas de salud, que se caracteriza por condiciones precarias y diferenciadas. Aquí nos centramos en los efectos en el acceso a salud que estos programas tuvieron en los hogares beneficiarios. Los resultados apuntan hacia una mejora residual en el acceso a los sistemas de salud, con características de acceso diferentes que construyen un nuevo escalón hacia abajo en la escala de estratificación de los sistemas de salud, convirtiendo a los beneficiarios de los programas en ciudadanos de segunda clase en cuanto a acceso de salud.

Abstract:
Desde finales de la década de los ´90, y especialmente a partir de la crisis del año 2001, los programas de Transferencia Condicionada cristalizaron en la región como respuesta plausible a las condiciones masivas de desigualdad y pobreza. A partir de las primeras experiencias en Argentina como el Plan Trabajar y el Programa Jefes y Jefas de Hogar la noción de inclusión ocupo un epicentro discursivo, fundamentando la ampliación y réplica de numerosos programas dentro de un marco estratégico con “rostro humano”. Esta escenificación, sin embargo, tendió a desdibujar los parámetros ideológicos y las consecuencias prácticas de las medidas orientadas. La profundidad y minuciosidad de las políticas sociales está ligada a su capacidad para configurar la condición existencial de los sujetos, al regular sus dosis de energía disponibles, sus prácticas moleculares, la disponibilidad sobre el cuerpo y la disposición para la acción; del mismo modo, en un sentido más general, demarcan las relaciones situadas entre-clases, que se traducen en una historia social posible, en la formación del sentido de la vida, la conciencia sobre el mundo y las historias colectivas. Sin estar determinadas en principio ni ser determinantes, pueden ser entonces interpretadas como fragmento de las estrategias que la sociedad capitalista ha llegado a aceptar como respuesta a la disponibilidad social de los sujetos, a fin de definir sus formas de estar y de hacer, tanto como el dónde, el cómo y el entre quienes. Desde este lugar, el presente trabajo propone un contrapunto a la “escenificación inclusiva” abordando empíricamente las experiencias de beneficiarios pertenecientes a un subprograma implementado en la ciudad de San Luis (Argentina) desde hace más de una década: el Programa de Seguridad Pública y Protección Civil.  Las nociones de círculos de encierro, muros mentales y fronteras sociales emergen en este marco como organizadores de las vivencias de reclusión que, “a cielo abierto”, atraviesan a los sujetos. Para llevar adelante el análisis se consideran entrevistas individuales y grupales sostenidas con beneficiarios, realizadas entre los años 2007 y 2016, afincadas en una perspectiva relacional que integra igualmente otros materiales significativos como documentos oficiales, noticias y datos estadísticos estructurales. Recuperar las experiencias y sensibilidades que, en este contexto, se van elaborando como trayecto de la dinámica social que “impacta” sobre los sujetos resulta un camino propicio para profundizar las relaciones entre estados de expulsión, estrategias de regulación social y sentir en la pobreza.

Abstract:
A tese da nova classe média (NERI, 2008a, 2008b, 2011) brasileira se fortaleceu ao longo da década de 2000, num período de democracia e prosperidade econômica, no qual se conjugavam crescimento econômico, aumento de empregos formais e políticas sociais. O momento político e econômico, amparado pelo Reformismo Fraco (SINGER, 2012), favorecia, então, a defesa da ideia da Classe C. Por sua vez, essa soava como a coroação da política do período. Não é à toa que a hipótese da classe C acabou se tornando assunto estratégico do primeiro governo Dilma Rousseff. No entanto, muitos especialistas questionaram os fundamentos teóricos da política, uma vez que a delimitação desse segmento, com base, sobretudo, na renda parecia ser insuficiente e pouco sustentável[1]. Para muitos desses intelectuais, a demarcação teórica da nova classe média escondia, na realidade, um grupo heterogêneo com altos índices de moradia inadequada, escolaridade insuficiente e ocupações de baixa renda (KERSTENETZKY & UCHÔA, 2013. No entanto, atualmente, o ambiente político revela-se pouco democrático e o cenário econômico brasileiro demonstra sinais de declínio e índices maiores de desemprego. Como, então, se encontra a suposta classe C nos dias de hoje, em termos de renda, ocupação e educação? Teria, de fato, a crise político-econômica atual colocado “um ponto final” ao ideal de mobilidade social para essa população? O que isso significa para a Política da Nova Classe Média? Como considera-la, dado os seus fundamentos, alcances, limites e contradições, tendo em vista o momento político-econômico atual? Este trabalho tem, portanto, como objetivo, analisar os níveis de renda/endividamento, taxas de ocupação, a estrutura ocupacional, os níveis de escolaridade atuais dessa população, bem como suas percepções acerca de sua situação material de vida ao longo da década de 2000 e verificar como esse segmento se encontra em meio à crise econômica atual.  Assim, com base nos resultados sociológicos encontrados, este trabalho procurará estabelecer uma análise dos resultados e um balanço crítico da Política da Nova Classe Média. Em termos metodológicos, este trabalho se utilizará dos dados estatísticos coletados a partir da aplicação de questionários na cidade do Rio de Janeiro entre julho e agosto de 2016, no âmbito do projeto de pesquisa “Entendendo mobilidade e precariedade: formas de vida, subjetividades políticas emergentes e a ‘nova classe média’”, liderado pelos professores Benjamin Junge, (SUNY-New Paltz), Sean T. Mitchell (Rutgers University, Newark), e Charles Klein (Portland State University) e, no qual, me integro como coordenadora de pesquisa da cidade do Rio de Janeiro.   [1] Ver, por exemplo, os seguintes trabalho: POCHMANN, 2012, 2014; CHAUÍ, 2013; SOUZA, 2010; COSTA, 2013; KERSTENETZKY & UCHÔA, 2013; QUADROS et al., 2013

Abstract:
La investigación que aquí proponemos se interroga por la construcción de identidades de clase media de trabajadores contratados de la Administración Pública de la Provincia de Buenos Aires, en particular, nos detenemos en aquellos trabajadores que desarrollan sus tareas cotidianas en áreas descentralizadas y “territorializadas” de la administración provincial en zonas residenciales habitadas por sectores populares en la ciudad de La Plata. Privilegiando un enfoque relacional, nos interesa especialmente reconstruir cómo estos trabajadores, a través de la gestión de proyectos y políticas públicas hacia y junto-con sectores populares, definen y practican una pertenencia con la clase media articulando simultáneamente discursos e imágenes sobre otredades-pobres. En diálogo con un conjunto de investigaciones que problematizan las políticas de pobreza desde los sectores medios (Elwood, Lawson y Nowak, 2015; Elwood, Lawson, Canevaro y Viotti, 2015), y que comparten también esta perspectiva relacional, intentaremos desentrañar las diferencias entre las concepciones y enunciaciones  sobre la pobreza proyectadas en el diseño de las políticas públicas, y las particularidades con que estos trabajadores traducen, apropian, tensionan en su labor e interacción habitual con sectores populares esas definiciones, movilizando diferentes políticas de pobreza: ¿desde qué concepciones sobre la pobreza estos actores llevan adelante políticas de respuesta? ¿Coinciden con aquellas proyectadas en el diseño de la política pública? ¿Se trata efectivamente de políticas de solidaridad y de protección social hacia la pobreza? ¿En qué medida podemos encontrar políticas implícitas, menos visibles, de discriminación u oposición en su labor cotidiana? Estos interrogantes se sientan en la necesidad de incorporar en el análisis la dimensión agencial, a veces ignorada, a veces poco teorizada (Lawson et al., 2011), de las clases medias en la producción social de la pobreza. En la misma línea, y en sintonía con el propósito de esta propuesta de investigación, creemos que la problematización de las identidades de clase media es un modo posible y relevante de interrogarnos por las desigualdades simbólicas, que, al ser practicadas activamente por los mismos actores (Dubet, 2015), trazan una frontera para la apropiación “legítima” de esas identificaciones. Desde un enfoque constructivista de las identidades sociales (Dubar, 2000; Hall, 2003; Brubaker y Cooper, 2001), y sobre la base de una estrategia metodológica que combina entrevistas semiestructuradas y observaciones de campo, intentaremos reponer las prácticas, discursos y posiciones múltiples a partir de las cuales estas identificaciones se articulan.

Abstract:
Políticas de superação da pobreza articuladas às econômicas ampliam-se em todo o mundo. No Brasil, a autossustentação econômica tem sido colocada como possibilidade de autonomia para famílias assistidas através do trabalho - com foco em beneficiárias do Programa Bolsa-família. Para tanto, programas de inclusão produtiva (IP) foram instaurados no âmbito do Programa Brasil sem Miséria em conjunto com a política de assistência social (AS). A IP envolve um conjunto de iniciativas de geração de renda, qualificação profissional, economia solidária e desenvolvimento local. Na literatura brasileira predominam críticas, as quais afirmam que a IP significa a perda de direito social, não compete à AS e cria alternativas econômicas precárias e desqualificadas. Tais críticas assemelham-se àquelas lançadas contra as políticas de ativação e do workfare state europeu e norte-americano. Com case nesta constatação, o trabalho busca analisar se as ações de IP desenvolvidas no âmbito da política de assistência social se constituem como um caso de workfare state. Para tanto, problematiza as origens e fundamentos das políticas de ativação e do workfare state, bem como analisa avanços e desafios da IP no Brasil, cujas ações foram amplamente deflagradas a partir de 2011. A metodologia foi composta por pesquisa exploratória (análise documental e entrevistas com gestores públicos da política social e econômica e com beneficiárias do Programa Bolsa-família); pesquisa-ação participante com gestores e técnicos; reuniões inter-secretarias e entrevistas com gestores do Ministério do Desenvolvimento Social (à época). A pesquisa revelou que, apesar da ampla cobertura nacional e dos massivos investimentos em IP, sua implementação apresentou baixa eficácia devido à carência da intersetorialidade; limites na geração de oportunidades econômicas; elevada desigualdade e condição de pobreza intergeracional e multidimensional; invalidação (questionável) de iniciativas econômicas plurais (afora o emprego formal) e baixa participação da população nos programas. Apesar dessas limitações, a pesquisa concluiu que a IP no Brasil não se trata, até este momento, de um caso de workfare. O ingresso ao mundo do trabalho não é compulsório nem condiciona o recebimento dos benefícios sociais, não significando, portanto, a perda de direitos sociais. Diferentemente da realidade europeia, a última década no Brasil foi marcada - ainda que com limites - pela ampliação das políticas públicas e redução da pobreza. Entretanto, destaca-se que a IP no Brasil é recente e revela um debate complexo e inconcluso, sendo necessário descolonizar análises que se pautam na realidade do Norte e repensar fronteiras epistemológicas entre o social e o econômico.   

Abstract:
La ponencia pretende compartir algunos resultados obtenidos en la investigación llevada a cabo durante los años 2013 – 2015 “Trabajo, Cuidados Familiares y Políticas públicas ¿Una nueva institucionalidad?”, inscripta en la línea de investigación sobre Políticas Públicas, Derechos Humanos, Instituciones y Trabajo Social,  que lleva adelante nuestro equipo de investigación.  A partir del año 2003 se inicia en nuestro país un momento diferencial en términos de conformación de un sistema de protección social más amplio e incluyente. Específicamente, en el año 2009, surge la Asignación Universal por Hijo para la Protección Social (AUH), programa de  transferencia condicionada de ingresos que representa un giro en las políticas públicas argentinas. Parte de sus resultados dan cuenta del impacto significativo en términos de cobertura de la pobreza e indigencia siendo caracterizada como la política pública más inclusiva de las últimas décadas.  Entre los años 2011-2013 indagamos acerca del proceso de la implementación de la AUH a través de la voz de las familias incorporadas y las instituciones que participan en el campo de dicha política, en tres departamentos de la provincia de Mendoza. Luego, acerca del Programa Ellas Hacen entre 2013-2015 que busca generar espacios de inclusión para las mujeres con enfoque de género. Como hallazgos advertimos una feminización de las políticas públicas dada la preeminencia de la figura femenina en el campo familiar, tanto en las gestiones de ingreso-permanencia como en las tareas de concreción de las condicionalidades, que ambas políticas establecen. También, la reproducción del modelo femenino de cuidado de las familias, sustentado en el patriarcado como práctica histórica tradicional generando una doble e, incluso, triple jornada de trabajo a las mujeres.  El estudio de ambas políticas da cuenta de procesos políticos que tienden a la transformación de la protección social en Argentina y procuran reconfigurar los programas de transferencia condicionada de ingresos, en el marco del  modelo de acumulación social que se pretende transformar desde el régimen político de gobierno presente durante su implementación. Originan modificaciones en el sistema previsional argentino, avances legislativos en la protección y promoción de derechos de niños, niñas, adolescentes y, la homologación entre los trabajadores desocupados y trabajadores ocupados en relación de dependencia, lo cual genera el marco propicio para la efectivización de la AUHPS y el Programa Ellas Hacen.  Tales políticas tienden a la universalización y la redistribución de la riqueza, puesto que se produce un viraje hacia una matriz de intervención estatal democratizadora instituyente con base en los derechos humanos, la inclusión social y la equidad entre géneros. No obstante, emergen algunas tensiones y contradicciones en su implementación, en las significaciones acerca de las familias y las mujeres, que resulta importante desentrañar, como aporte para dilucidar las complejas relaciones entre desigualdad, pobreza, exclusión social, género y derechos humanos.

Abstract:
Este trabajo es un análisis de las políticas sociales que se han implementado en México, para esto se analiza el papel de las políticas sociales en el país y se aborda transitoriamente su implementación en América Latina. Las políticas sociales han sido políticas de control  en algunas regiones de América Latina, como también lo ha sido en México. En vez de combatir la pobreza, se han implementado para dividir a la población y a los movimientos anti sistémicos. En México el combate a la pobreza ha sido de los pilares fundamentales de las políticas del Estado. A partir del sexenio de Carlos Salinas de Gortari (1988-1994) surgen programas sociales para combatir la pobreza, tomando como antecedente PRONASOL pasando por Progresa, presentado en la gestión de Ernesto Zedillo (1994-2000), Oportunidades, implementado en el gobierno de Vicente Fox (2000-2006),  extendido con Felipe Calderón (2006-2012) y, actualmente Prospera programa de inclusión social arrojada por la administración federal del presidente  de México Enrique Peña Nieto. De tal forma que en el presente trabajo se hace un análisis histórico de lo que fueron y son los programas sociales y la lucha contra la pobreza en México desde esta línea se retoma el concepto de política social para explicar desde los distintos enfoques teóricos el rol que tiene el México la política social frente a la pobreza,  Palabras clave: Política social, pobreza, programas sociales              

Abstract:
El presente trabajo analiza los significados que construyen sujetos vulnerables respecto del Estado y la sociedad, en situaciones de riesgo e incertidumbre. El análisis muestra la presencia de sentidos vinculados con las lógicas de liberalización de las políticas públicas, así como procesos de individualización en el Chile contemporáneo. El presente trabajo se basa en dos estudios centrados en análisis cualitativo de entrevistas a familias vulnerables urbanas en la capital del país. En el contexto del actual modelo neoliberal, el análisis llevado a cabo muestra que existe una preeminencia de un sentido individual y familiar de gestión y enfrentamiento de los riesgos en detrimento de la sociedad, el Estado o el mercado como ámbitos institucionales de resolución de los problemas. Ello aparece como un elemento problemático, en el contexto del aumento de políticas y esfuerzos públicos y privados destinados a minimizar la pobreza y vulnerabilidad. Paralelo a dicho esfuerzo individual y familiar, existe un sentimiento de descontento y desconfianza con las instancias públicas que tradicionalmente brindan certidumbre y seguridad a la sociedad. La investigación se llevó a cabo en familias de quintiles II y III de distintas comunas de la Región Metropolitana y se basó en una estrategia metodológica cualitativa, a través de la aplicación de cuarenta entrevistas semiestructuradas a jefes de hogar y miembros no jefes de hogar de estas familias, y cuatro grupos de discusión. Las entrevistas se desarrollarondurante los años 2010 y 2011 en cinco comunas de la Región Metropolitana (La Pintana, San Bernardo, La Florida, Huechuraba y La Granja), a miembros de familias bi y monoparentales, en distintas etapas del ciclo vital familiar. Los criterios de selección de la muestra fueron: jefes/as de hogar y miembros de familias de quintiles II y III; hogares en etapa de expansión y consolidación; hogares monoparentales y biparentales; jefes de hogar con escolaridad completa eincompleta. El trabajo aborda, en primer lugar, el contexto de las políticas sociales y el sentido neoliberal de las mismas en las últimas décadas en Chile, para luego dar cuenta de los discursos y significados que sujetos sociales vulnerables despliegan para fundamentar sus prácticas en contextos de crisis socioeconómica. Dichos relatos muestran la dinámica relación que existe entre discursos, prácticas institucionales y fundamentos subjetivos.

Abstract:
O objetivo do artigo é analisar os limites impostos pela superexploração da força trabalho e pelo capitalismo dependente latino-americano às novas tendências da política social, através dos programas de geração de emprego e renda para os beneficiários dos Programas de Transferência de Renda Condicionada (PTRC). Nos últimos anos, estão sendo implantados em vários países da América Latina programas de geração de emprego e renda destinados aos adultos em idade de trabalhar, que vivem em lares de famílias beneficiárias dos  PTRC. Isso se deve à constatação de que até agora as transferências condicionadas têm contribuído apenas para o alivio da pobreza do que para uma verdadeira ruptura de sua reprodução intergeracional, baseada em uma melhor inclusão laboral se seus destinatários. Na região atualmente existem 15 países que possuem programas de geração de emprego e renda, que podem ser classificados em entre os programas de melhoramento da oferta de trabalho, tendentes a fomentar a capacitação técnica e profissional, assim como a nivelamento de estudos, e os programas orientados a ampliar a demanda laboral ou estabelecer vínculos com potenciais empregadores. As políticas de transferência monetária, aliadas à política de geração de emprego e renda, enfrentam dificuldades e obstáculos próprios de uma região marcada pela informalidade e pela desigualdade no acesso às oportunidades. Os déficits de formação educacional e habilidade para o trabalho, a debilidade dos vínculos com o setor privado geradores, de emprego, a escassa existência de oportunidades laborais no território, e as brechas e barreiras étnicas e de gênero conspiram contra a factibilidade de que estes programas logrem impulsar processos dinâmicos de incorporação dos mais pobres e vulneráveis ao mercado de trabalho. Há características essenciais que indicam a relação entre as novas tendências da política social, e aspectos próprios do capitalismo dependente, como por exemplo, a superexploração da força de trabalho. Em primeiro lugar, está o condicionamento às exigências externas, dado que a diminuição da pobreza serviu como critério condicional para os acordos de empréstimos com o Banco Mundial e Fundo Monetário Internacional (FMI). Por outro lado, os problemas sociais e superexploração da força de trabalho agravaram o quadro de emergência social inerente à realidade latino-americana. A precarização do trabalho e a pobreza são os resultados da forma como as relações econômicas se reproduzem na região – vulnerável e dependente – e que finalmente justificará a formulação de políticas sociais compensatórias e focalizadas. Os programas são, portanto, a consequência do contexto social para o qual estão orientados, e se apresentam como meio necessário para gerir, e não efetivamente para solucionar o problema, e acabar com a pobreza.

Abstract:
O Brasil é um país marcado por intensa desigualdade social. Ao mesmo tempo em que é uma das maiores economias do mundo, possui16 milhões habitantes em situação de extrema pobreza. Por muitos anos, o Estado brasileiro buscou lidar com essa realidade por meio de programas focalizados, de caráter compensatório e com forte viés assistencialista. Isso começou a ser mudado com a aprovação da Política Nacional de Assistência Social (PNAS), em 2004. Tal política estabelece que a assistência social não é favor ou caridade, mas direito de todo cidadão em situação de desproteção social. Além disso, ela rompe – ao menos no plano discursivo – com a prática do “primeiro-damismo” e com o caráter de urgência e clientelismo das políticas sociais. Cabe destacar que a PNAS é operacionalizada por meio do Sistema Único de Assistência Social (SUAS), um mecanismo de proteção social não contributivo, de responsabilidade dos três entes federativos que compõem o poder público brasileiro (Federação, Estados e Municípios). Nele, o território é a base de ações e serviços organizados em dois níveis de atenção: a “Proteção Social Básica” e a “Proteção Social Especial”. A primeira tem como objetivo prevenir situações de risco através do desenvolvimento de potencialidades e aquisições, além de fortalecer vínculos familiares e comunitários. Já? a Proteção Social Especial é a modalidade de atendimento assistencial destinada a famílias e indivíduos que já se encontram em situação de risco pessoal ou social. Além de mudar o modo como a assistência social é concebida, a PNAS instituiu uma série de benefícios socioassistenciais que propiciaram uma significativa melhora nos índices de desenvolvimento humano no Brasil. De acordo com o Banco Mundial, o número de pessoas vivendo em situação de pobreza extrema caiu 64% entre 2001 e 2013, passando de 13,6% para 4,9% da população brasileira. A despeito das relevantes transformações produzidas por essa “nova” política de assistência social, não podemos perder de vista seus limites, dificuldades e contradições. Não podemos nos esquecer, por exemplo, que ela não deu conta de eliminar a imensa desigualdade social existente em nosso país. Nem que suas normativas indicam a importância do oferecimento de condições de trabalho adequadas, bons salários, realização de concursos públicos e formação continuada. E o que encontramos, em muitos municípios, são profissionais “terceirizados”, despreparados, com vínculos empregatícios precários. Tampouco podemos nos esquecer que práticas clientelistas e assistencialistas não fazem parte apenas de um passado remoto, mas ainda permeiam os atendimentos de muitos serviços socioassistenciais, localizados em várias regiões do país. Não podemos nos esquecer, sobretudo, que essa política “nova” está se tornando “velha” cedo demais, na medida em que seu processo de implementação mal foi concluído e já começa a ser balançado por (não tão novos) ventos neoliberais.

Abstract:
O objetivo do presente trabalho é analisar as características da proteção social do Brasil e do Chile para evidenciar um processo de convergência entre os dois países. A análise estará centrada nas mudanças das propriedades da relação entre sociedade, mercado e Estado em três áreas da seguridade social: saúde, previdência e assistência social. Até o final do século XX, as duas nações apresentavam sistemas de proteção muito díspar. O Chile, considerado um tradicional exemplo neoliberal na América Latina, consolidou a ampla mercantilização da proteção social, a partir de 1981. Contudo, o país iniciou um processo de mudança no século XXI, assim que foram diagnosticados resultados negativos deste sistema privatista para a sociedade, ao mesmo tempo, em que aumentavam as pressões populares contra o governo pela reforma. O Brasil com a Constituição de 1988 deveria instituir a provisão pública na seguridade social, configurando um modelo de proteção universalista e fortemente alinhado ao paradigma do Welfare State. No entanto, a nova constituição criou um paradoxo, afinal estava desalinhada das orientações propostas pelo pensamento hegemônico neoliberal. Portanto, a conjuntura sempre foi política e economicamente hostil, permitindo verificar uma contrarreforma conservadora. Ocorreram novas tensões em favor da ampliação da provisão privada. Importante sublinhar que a seguridade social ainda é um assunto delicado em todo continente, principalmente, por ser considerado incompleto ou em construção, se comparado ao padrão socialdemocrata europeu. Ademais, o ajuste estrutural realizado por alguns países latino-americanos não garantiu melhores condições de proteção à população, tornado o tema urgente. É pretendido descrever o histórico das mudanças recentes no campo da proteção social dos dois casos selecionados, para em seguida analisar como tem sido a provisão de bem-estar, ou seja, debater e avaliar as implicações das alterações em curso nas três áreas da seguridade social. Decerto, há um privilégio dos mínimos sociais, ou seja, das políticas públicas focalizadas na população em maior grau de vulnerabilidade para amenizar os efeitos da pobreza, sem a pretensão de acabar com ela ou oferecer igualdade de condições para todos os cidadãos competirem no mercado. Desta forma, os dois países têm constituído, paulatinamente, um modelo de proteção social dual, em conformidade com a norma nº 202 da OIT. De um lado, há a consolidação de uma rede de proteção social pública com base em mínimos sociais a ser oferecida para a parcela pobre da população. De outro lado, há a materialização de um sistema privado e custeado pela renda da população em melhores condições financeiras. Portanto, um modelo que tende a não reverter a heterogeneidade estrutural da desigualdade.